Los carburantes vuelven a caer esta semana y llegan a la operación salida con los precios más bajos en 7 años

La Dirección General de Tráfico (DGT) pone en marcha a partir de las 15.00 horas de este viernes el dispositivo especial para la operación retorno del mes de julio y salida del mes de agosto, para la que se prevé que se produzcan 6,5 millones de desplazamientos de largo recorrido por las carreteras españolas.

Según los datos del Boletín Petrolero de la UE, el precio medio del litro de gasolina se ha situado esta semana en los 1,144 euros, ahondando en sus niveles mínimos desde abril, tras encadenar su cuarta semana de caídas.

Por su parte, el litro de gasóleo marcó esta semana los 1,026 euros, en mínimos desde mayo, después de sumar su tercera semana consecutiva a la baja.

En lo que va de mes, la gasolina ha visto abaratado su precio en más de un 3%, mientras que el precio del gasóleo ha caído casi un 2% en julio.

Así, en los prolegómenos de las operación salida de agosto, el litro de gasolina cuesta un 12,47% menos que hace un año, mientras que en el caso del gasóleo el abaratamiento es del 9,76%.

CASI 9 EUROS MÁS BARATO EL LLENADO DEL DEPÓSITO DE GASOLINA.

De esta manera, llenar el depósito de un vehículo con 55 litros de gasolina cuesta ahora una media de 62,9 euros, lo que supone casi 9 euros menos que hace un año en estas fechas.

En el caso del gasóleo, el llenado del depósito asciende actualmente a 56,4 euros, lo que representa un ahorro para el bolsillo de más de 6 euros con respecto a la operación salida de agosto de 2015.

La operación salida más cara de los últimos siete años fue la de 2013. A finales de julio de aquel año el precio medio de la gasolina era de 1,472 euros, mientras que el litro de gasóleo costaba 1,376 euros.

PRECIOS EN LA UE.

Los carburantes son más baratos en España que en la media de la UE y la zona euro, donde el precio de venta al público del litro de gasolina se sitúa en 1,292 euros y en 1,321 euros, respectivamente. Por su parte, el litro de gasóleo cuesta 1,136 euros de media en la UE y 1,12 euros en la eurozona.

El menor nivel de precios finales con respecto a los países del entorno se debe a que España, pese a las subidas del IVA, a los mayores impuestos y a los nuevos gravámenes al biodiésel, sigue contando con una menor presión fiscal en general.