Rusia adopta un paquete de sanciones contra Turquía

Estas restricciones, según ha explicado el Gobierno ruso en un comunicado, permanecerán en vigor el tiempo que sea oportuno mientras no cambie la actitud de Ankara, que denunció que el avión ruso había entrado en su espacio aéreo, algo que Moscú desmiente.

"El Ministerio de Desarrollo Económico y el Ministerio de Asuntos Exteriores junto con las instituciones federales de poder ejecutivo correspondientes monitorearán el cumplimiento del decreto vigente y en caso de necesidad, teniendo en cuenta la actuación de Turquía, introducir propuestas correspondientes al cambio de plazos de su vigencia o al carácter de las medidas económicas y otras contempladas en el decreto", señala el comunicado, según la agencia Sputnik.

En concreto, Rusia ha prohibido la importación de toda una serie de productos agrícolas procedentes de Turquía a partir de 2016. La lista la componen cítricos, tomates, carne de pollo y pavo, cebolla, coliflor, brócoli, pepinos, uva, manzanas, pera, albaricoques, melocotones, ciruelas, fresas y sal.

Las sanciones también incluyen la prohibición de vuelos chárter desde y hacia Turquía a partir de este 1 de diciembre, con la excepción de los aviones con turistas rusos que están regresando de este país.

Además, según el comunicado del Gobierno, "se ha encargado (al Ministerio de Transporte) adoptar también medidas adicionales orientadas a garantizar la seguridad de los vuelos regulares desde y hacia Turquía".

Igualmente, el Gobierno ha decretado suspender las labores de la comisión intergubernamental para la cooperación económica y comercial con Turquía, creada en 1992, así como las negociaciones sobre inversiones y compraventa de servicios, al igual que sobre el fondo conjunto de inversiones.

Además, se han suspendido las labores sobre el proyecto de un programa a medio plazo para la cooperación económico-comercial, técnico-científica y cultural entre ambos gobiernos para el periodo entre 2016 y 2019.

El presidente ruso, Vladimir Putin, que había calificado el derribo del avión como "una puñalada por la espalda" asestada por los "cómplices del terrorismo", había ordenado este sábado la imposición de restricciones económicas contra Turquía, en particular en los ámbitos de comercio, viajes y empleo.