Sucede en apenas 5 segundos, cinco de los segundos más largos de las vidas de muchos de los protagonistas de este vídeo. La furgoneta baja por las ramblas como un proyectil, y la gente que paseaba por allí tiene centésimas de segundo para reaccionar. Impresiona ver, si acercamos la imagen, a dos padres que libran el vehículo con el carrito de su hijo por pocos centímetros.