200 vecinos de la Barceloneta se han concentrado en la playa en contra del denominado turismo ‘de borrachera’. Insisten en que no es ‘turismofobia’ pero sí que están en contra del turismo low cost que invade sus calles, hace subir el alquiler y deja escenas como una mujer durmiendo en un sofá en la calle o a un grupo de jóvenes comprando desnudos.