El año ha estado marcado por 3 macrojuicios: Nóos, tarjetas black y la trama Gürtel. El juez Joaquim Bosch tiene claro que “la justicia no tiene recursos suficientes” para combatir la corrupción, y añade que “los corruptos tienen más instrumentos para eludir la justicia que nosotros para perseguirles”. Bosch recuerda que “esto no tiene por qué ser así, los atentados del 11-M se resolvieron con eficacia de un modo ejemplar”.