Saltó al tendido y exhibió una tarjeta roja, se lo llevó la guardia civil y, ahora, eldiario.es emite lo que pasó después. Un Guardia civil amenazaba con “reventar” al activista si no le decía si había alguien más en la grada: “Asumo las responsabilidad pero que me peguen cuando estoy aquí tranquilo…”, respondía el activista.