El herido español en el atentado de Berlín: "Creí que no podía soportar semejante dolor"
12 personas han muerto y 48 han resultado heridas tras el atropello de un camión en un mercadillo navideño en el centro de Berlín. Uno de los heridos es Iñaki, un estudiante de 21 años, que estaba con dos amigas en el mercadillo en el momento del atentado y ha narrado en Twitter lo que ha vivido.
“Un camión negro ha entrado a toda hostia, cargándose par de casetas y arrollando a todo el mundo, me ha arrollado y atropellado ambas piernas”. Tiene fracturas de tibia, peroné, tobillo y cadera y ha tenido que ser intervenido: “Estoy bien gracias a la cantidad de drogas que me han enchufado por vena, cada vez que lo pienso más me duele, creí que no era capaz de soportar semejante dolor”. Además, ha lanzado un mensaje de gratitud para quienes le ayudaron: “La gente no herida se portó de lujo. Cojines, agua, comida, mantas gorros, bufandas…”
Su familia llegaba unas horas después. Iñaki ha sido operado en Berlín y, a pesar de las fracturas, el estudiante se encuentra bien.
Sonia, testigo: “Estamos muy asustados, no nos lo creemos”
También hemos podido escuchar el testimonio de Sonia, que vive al lado del mercadillo, un lugar al que suele acudir tras el trabajo: “Media hora antes me fui a casa. Vivo al lado, muchas veces me paro a tomar algo pero ayer no sé por qué decidí irme antes”. Sonia nos explica que todos están “muy asustados” y aún incapaces de asumir lo sucedido: “Es muy difícil, tenemos en Alemania un gran problema con la extrema derecha y tenemos miedo de que lo usen como argumento para seguir con sus políticas”.
El sospechoso del atentado de Berlín podría haber sido detenido por error
Giro en la investigación en Berlín. Horas después del atentado en un mercado navideño del centro de la ciudad, el diario Die Welt publica que se ha detenido “al hombre equivocado” y lo afirma citando a fuentes policiales.
Gil Garre, sobre el atentado de Berlín: “Este tipo de ataques son muy difíciles de detectar”
José María Gil Garre, analista del Observatorio de Seguridad Internacional, ha apuntado que este tipo de ataques “son muy difíciles de detectar”. Además, ha explicado que el objetivo de un atentado es “generar nuevos contextos, desestabilización social, desconfianza e incluso cambios legislativos", por lo que añade que "las reacciones islamofóbicas son quizá el principal aliado que tienen los terroristas en Europa”.
