Jero se ve obligado a parar el experimento

Jero necesitaba comprender cuales eran los problemas que tanto Sabina como su familia tienen para haber llegado a esa situación insostenible. La pequeña de la familia le ha echado en cara a su hermana que no se interese por su bienestar y que únicamente la llame para echarle en cara su comportamiento con la madre de ambas. Por su parte, María José no puede entender que su hermana pequeña no valore que su madre esté cuidando tanto de ella como de su hija pequeña, mientras ella se ha tenido que valer siempre por sí misma. Su madre también tenía algo que decir, no soporta que Sabina solo piense en chicos y vaya de una pareja a otra sin sentar la cabeza. Jero ha tenido que para el experimento porque lo único de lo que las tres eran capaces era de machacarse mutuamente.