Ante la difícil situación que vive con Carolina, Paqui llama a su hija mayor, su único apoyo. Belén intenta poner paz pero no es posible. La relación entre las hermanas tampoco es buena. "No soporto que la trate así a mi madre. Me hace perder los nervios porque se lía con ella de tal manera que se la va a comer. Eso no lo permito", dice Belén.