Cristian no tiene carnet de conducir y sus padres intentan evitar por todos los medios que no coja el coche. Para ello, optan por quitarle las llaves lo que provoca el enfado del joven. "He intentado poner normas pero no ha respetado nada. Me tiene mucho odio y disfruta haciendo daño donde más me duela, en las cosas del campo", dice su padre.