Una mala experiencia del pasado marcó la vida de Yedra durante su estancia en primaria. La joven no solo recibía burlas e insultos de sus compañeros de clase sino que llegaron a cortarle el pelo para mofarse de ella. Yedra acumuló rencor por el acaso recibido hasta que llegó a rebelarse. “Elevaste tu autoestima con agresividad”, sentencia Jero.