Raquel ya no sabe cómo despegarse de su marido, Eduardo. Además, quiere irse de viaje con una amiga a Grecia y no sabe cómo decírselo. Lo último que se le ocurre es organizar un encuentro entre este y Vanesa, y cuando estén juntos sorprenderles para hacerse la sorprendida y la dolida y así decirle que necesita un tiempo para pensar. ¿Saldrá bien su plan?