El lujo ha llegado a uno de los mayores reclamos de Galicia: el Camino de Santiago. De los 300.000 peregrinos que llegaron a la Plaza del Obradoiro en 2017, algunos lo hicieron como peregrinos VIP, una modalidad de desplazamiento que ofrece múltiples comodidades en el trayecto, como la ayuda de un equipo que lleva el equipaje.