Las hijas de Maradona declaran ante el juez y vuelven a señalar al médico y la psiquiatra: “A mi papá le daban una pastilla misteriosa"

Desde el entorno de Maradona están convencidos de que los cuidados que recibió el argentino no fueron los adecuados y son muchas las declaraciones los que señalan al personal sanitario que hubo a su alrededor. Son ya cinco los imputados los que se encuentran en pleno proceso de investigación.

En medio de todo esto, familiares siguen compareciendo ante el juez para dar su versión. Esta semana fueron dos de las hijas de Diego las que lo hicieron. Gianinna y Jana Maradona señalaron directamente a Leopoldo Luque y Agustina Cosachov y una de ellas comentó que tomaba alcohol y marihuana. “Lo vi alcoholizado y en alguna oportunidad creo que estaban presentes Luque o Cosachov”.

“El personal de la Clínica Olivos quería internarlo en una clínica especializada y Luque se oponía y se agarraba la cabeza. Cosachov respaldó la internación domiciliaria propuesta por Luque. Me daba cuenta por el olor que mi papá fumaba marihuana con Charly".

Charly era un familiar de la última pareja que tuvo Maradona y fue nombrado en los audios revelados por Infobae en donde había personas que se encargaban del cuidado del argentino quejarse de este. “No aguanto más la situación de que Charly le dé marihuana a Diego, no sé cómo hacer para cortarlo” y añadía “Charly había traído a una mujer por la noche. Entonces para quitarse de encima a Diego le dio cerveza y porro. Lo quebró en mil pedazos”.

Gianinna seguía la misma línea de su hermana Jana. “A mi papá le daban una pastilla misteriosa para que si tomaba alcohol le diera asco o rechazo”. “A mi papá le daban una pastilla misteriosa para que si tomaba alcohol le diera asco o rechazo”.También apuntó que en muchos casos Maradona no se podía comunicar con ellas. “A mi papá le cambiaban el teléfono constantemente. Mi papá no sabía usarlo, no sabía cambiar el chip. Solo sabía mandar mensajes de voz. Y siempre había alguien dictándole”.

Cuando Diego fue intervenido se abrió un debate en su entorno más cercano. Que fuera trasladado a otro centro para que continuara su recuperación o llevarlo a un domicilio para que allí lo hiciera que es lo que finalmente sucedió. Sobre esto también Gianinna habló.

“Yo había propuesto otra casa mucho más barata y con una habitación con baño en suite y me dijeron que no”. Comentaba que a pesar de estar rodeado de muchas personas tenía muchas carencias y precariedad. “Cuando se iba Monona (la cocinera) de domingo a martes no quedaba nadie para cocinar ni limpiar. Lo hacía todo el entorno”.