Lewandowski, el último en rebelarse: los jugadores que se declararon en rebeldía para salir del club

Robert Lewandowski está poniendo todo de su parte para poder salir del Bayern de Munich. Han sido varias las ocasiones en las que ha dicho públicamente que para él su etapa en la Bundesliga está acabada y que quiere jugar en el Barça. De momento han sido palabras, pero algunos otros jugadores pasaron a los hechos, como no presentarse a los entrenamientos o gestos hacia su club que dinamitaron la situación.

Si pensamos en las fechas más recientes, además de Lewandowski, hay que ir hasta 2018. Courtois se ha convertido en una de las piezas claves del Real Madrid, pero llegar aquí no fue fácil. Los blancos habían ofrecido un precio por el belga y el Chelsea se resistía a aceptarla. Para ello dejó de ir a los entrenamientos hasta que finalmente aceptaron los 35 millones. El portero se vistió de blanco y el resto ya es historia.

El lateral derecho se hizo conocido en España en su etapa en el Sevilla. Era en el 2007 cuando el equipo hispalense acababa de ganar la Supercopa de España e iba a disputar la de Europa cuando el brasileño pidió que su club aceptara el dinero que el Chelsea ofrecía por él.

El primer partido de Liga contra el Getafe se negó a jugarlo, pero sucedió el trágico suceso de Antonio Puerta en donde sufrió una parada cardíaca y días posteriores falleció. El defensa decidió dejar este tema espinoso a un lado tras la complicada situación en la que se quedó el club y juega toda la temporada. Al terminar fue cuando fichó por el Barcelona.

El galés ha terminado con más sombras que luces su etapa en el Real Madrid, pero fue uno de los que luchó por fichar y vestir de blanco. Era la estrella del Tottenham y no le querían dejar marchar. Bale no dio ni un paso atrás en su objetivo y no se llegó a presentar en la pretemporada y les dijo claramente a sus compañeros que quería irse al Madrid.

Las negociaciones fueron duras y el conjunto madrileño tuvo que desembolsar 100 millones de euros para ficharlo en el 2013.

El centrocampista salió siendo muy joven del Barça en busca de minutos y experiencia. En el Arsenal la encontró y cuando ya estaba hecho como jugador decidió que lo mejor era volver a casa, pero los ingleses no estuvieron por la labor.

Desde 2006 el catalán expresó su deseo de irse y volver a Barcelona, pero pasaban los veranos y no se cumplía hasta que en el 2011 se plantó. Wenguer cedió y el equipo culé le fichó.

El caso del hispanobrasileño fue algo distinto. El delantero se proclama campeón de la Primer con el Chelsea en el 2017, pero durante sus vacaciones recibe un mensaje de Antonio Conte de que ya no cuenta con él para la próxima temporada y que el club le va a buscar destino.

El conjunto inglés ve con buenos ojos la opción que se le presenta en la liga China, pero el jugador se niega en rotundo y amenaza con denunciarlo por ‘obligarle’ a irse donde no quiere. En ese momento, el Atlético de Madrid estaba interesado, pero tenía una sanción de que no podía fichar en ese verano. Tuvo que esperarse hasta enero de 2018 para poder efectuar el traspaso.

El Barça vendió a Neymar por 222 millones y con tal cantidad de dinero se lanzan a por Coutinho, que por aquel entonces destacaba en la Premier. El Liverpool de Klopp se niega a venderlo, pero él a lo largo de los meses no desiste en su empeño de vestir de azulgrana.

Finalmente, en enero de 2019, el delantero se declara en rebeldía y consigue que el equipo inglés acepte los 120 millones por él. El brasileño nunca terminó de adaptarse al club y fue vendido al Aston Villa por 20 millones al final de la temporada en 2022.

El delantero protagonizó dos episodios para conseguir lo que quería. El primero cuando estaba en el PSV que tras rebelarse pudo fichar por el Barça. Tras pasar por aquí se fue al Inter de Milan y fue ahí donde aplicó la misma táctica.

Ronaldo se negó a ir a los entrenamientos y fue entonces cuando el Real Madrid consiguió ficharle el último día de mercado.

Llega la pretemporada de 2009 y el francés nada más llegar expresa su deseo de macharse porque ya no cree en el proyecto del Bayern de Munich con el objetivo de llegar al Real Madrid en el verano de los ‘galácticos’.

El delantero se ejercitó solo durante varios días, pero desde el club alemán le dejaron claro que no iba a salir. Finalmente recapacitó y decidió quedarse, no solo ese año si no que siguió hasta el 2019.