Ordenan, mandan, sufren y aplauden a sus jugadores durante todo el partido. Son amigos, sus esposas son amigas, ambos coinciden en que Messi es el mejor jugador del mundo y por si fuera poco visten de forma parecida. Eso sí, Luis Enrique avisa que le aunque le gusta que le comparen con Guardiola él solo se parece a sí mismo. Lo que espera el barcelonismo es que asemejen en los títulos.