El Sevilla tiró a la basura los primeros 45 minutos ante el Liverpool y le salió demasiado caro. Los de Klopp se pusieron 0-3, y los de Berizzo se desmelenaron en la segunda mitad para empatar el partido en el descuento. La buena noticia es que el Sevilla depende de sí mismo, tiene que ganar al Maribor en la última jornada, para estar en los octavos de final de la Champions.