Aston Martin no va a dar prioridad al coche de 2023, con el que pilotará Alonso: "No lo vería correcto"

Fernando Alonso ha decidido embarcarse en una nueva aventura en la Fórmula 1 a partir de 2023. El piloto asturiano abandonará el equipo Alpine y se unirá a Aston Martin, escudería con la que, recientemente, ha relevado que tiene un contrato de dos años.

Ha sido un movimiento que muy poca gente esperaba, pues el bicampeón ha insistido durante el verano a la escudería francesa que empezara a trabajar de cara al coche de la próxima temporada.

Lo que le ha podido animar a realizar este movimiento pasa por una relación tumultuosa con Alpine en los últimos meses y el poder de decisión que adquirirá en Aston Martin. Alonso podrá decidir si continuar en el equipo británico un año más o no cuando finalice la temporada 2023.

Ahora bien, ese poder de decisión tiene un límite. El jefe de su futura escudería, Mike Krack, ha asegurado que no le parecería justo para los pilotos actuales que se empezara a trabajar en el monoplaza de la temporada que viene, dejando de lado el coche de este año.

"No estamos totalmente centrados en 2023. Creo que sería muy fácil dejar este coche de lado, pero sería una excusa para centrarse ahora en el nuevo, no lo vería correcto. Hay que recordar el drástico cambio de normativa que ha llegado este año, y ahora las reglas no van a modificarse tanto. Me gustaría desarrollar el coche hasta la última carrera", ha explicado el jefe de Aston Martin.

Es por ello que trabajan en ambos coches sin descuidarse en exceso de uno de los dos. Un grupo de mecánicos se encargan del monoplaza actual y otro grupo ya está manos a la obra con el coche de 2023.

"En estos momentos, estamos en una línea paralela. Tenemos un grupo trabajando en el coche nuevo y a otro en el de esta temporada. No vamos a parar con este ahora por el hecho de que no podemos terminar el trabajo en estos momentos", ha añadido Krack para cerrar.