El madrid está en Los Ángeles, EEUU, y están levantando pasiones. Hay quienes recorren cientos de kilómetros de carretera o esperan horas y horas al sol entre neveras portátiles y refrscos para aguantar el calor. Hay quienes incluso llevan a sus bebés. Todo por ver aunque sea unos segundos a sus ídolos.