¡Cuando el karma está de tu lado! De fallar dos tiros libres a la canasta de la victoria en tres segundos

Generación Pro
07/03/201811:59 h.El instituto de Ardsley y el de Tappan Zee jugaban la final por el título de la New York Class A. A falta de 3.9 segundos para el final, el equipo de Ardsley perdía 51-49. Julian McGarvey tuvo la oportunidad de empatar el partido y forzar la prórroga con dos tiros libres, pero los falló.
Cuando todo el equipo pensaba que el partido ya estaba perdido, McGarvey robó una pelota en la línea de triple de su propio campo y lanzó con toda sus fuerzas. La pelota entró y el público enloqueció. Los aficionados invadieron la pista para celebrar el primer título estatal del instituto de Ardsley en sus 60 años de historia.
McGarvey no podía creerse lo que acaba de hacer: “Cuando fallé los tiros libres, el mundo se me vino encima e iba a empezar a llorar. Poco después robé la pelota, me tropecé y cuando me estaba cayendo hacia atrás, lancé. Mientras la pelota estaba en el aire, pensé que sería una forma muy guay de acabar el partido pero no creía que fuese a entrar”.
Su entrenador, Sean Cappiello, sin embargo, estaba convencido de que iba a encestar: “Tan pronto como salió de su mano, pensé que era el mejor brazo que había entrenado jamás, por lo que sabía que la pelota iba dentro”. Y es que el joven McGarvey es, además, jugador de fútbol americano. El próximo año jugará de quarterback en el equipo de la Universidad Marist College. Un hecho que el propio jugador cree que ayudó: “Diría que mi brazo de quarterback ayudó un poco. Esta vez di en el blanco, justo en el fondo de la red”.
Con 11 puntos, cuatro asistencias y cuatro rebotes, McGarvey fue elegido MVP del partido. Aunque tiene claro que su futuro está en el fútbol americano, su canasta ya ha dado la vuelta al mundo. Si cambia de opinión seguro que no le faltan ofertas de equipos de baloncesto.