Los insultos racistas a Danny Rose en Montenegro, la penúltima vergüenza del deporte

cuatro.com
26/03/201918:10 h.Es, desgraciadamente, un nuevo caso de insultos racistas en el deporte. Y son demasiados en lo que va de año. En febrero, el metro de París amaneció con una serie de pintadas insultando a Mbappé sólo porque su madre es argelina y su padre camerunés. Pecados capitales, por lo visto.
En el mundo del baloncesto, y más concretamente en la NBA, un vídeo se hizo viral después de que Russel Westbrook increpara a un aficionado, expulsado de las canchas de por vida, porque le dijo: “Ponte de rodillas como sueles hacer”.
Y hay más. En este mismo mes, aficionados del Dinamo de Kiev proliferaron insultos racistas al futbolista del Chelsea Callum Hudson-Odoi en un encuentro correspondiente de la Liga Europa. Sané y Gündogan, internacionales con Alemania, también fueron increpados en un encuentro amistoso -‘AMISTOSO’- entre la selección de Joachim Löw y Serbia.
Lamentablemente, estos casos de personajes que se esconden detrás de una afición son muy recurrentes en recintos deportivos de todo el mundo. Pero también ocurre a la inversa. El Sheffield United no dudó en tomar cartas en el asunto de Sophie Jones, una futbolista que ha dado por finalizada su carrera deportiva tras ser apartada por su club por haber presuntamente proferido ‘sonidos de mono’ a Renee Hector, una rival del Tottenham.