Leo Messi y Gerard Piqué viven días convulsos después de las polémicas en las que se han visto envueltos en las últimas semanas. Ajenos a los problemas, los culés se han relajado charlando juntos en el entrenamiento matutino. Después de varios minutos de risas y poca tensión, ambos se han concentrado en el entrenamiento para olvidarse de conflictos.