El Real Madrid iniciará su pretemporada en Canadá y la llegada del equipo blanco ha sido más accidentada de lo esperado. Al bajar del autobús, el equipo de Zidane se encontró con un recibimiento tan caluroso que tuvieron que intervenir los miembros de la seguridad. Agarrones, lágrimas y golpes en un aterrizaje algo forzoso en la pretemporada.