El clásico de Liga dejó algunas imágenes que días después aun se cuelan en las conversaciones sobre fútbol. Messi y Ramos tuvieron un encontronazo en el césped que no dejó a nadie indiferente. El capitán del Real Madrid toca la cara del jugador azulgrana con el brazo. El Barcelona pedía tarjeta, el Madrid se defendió alegando que fue un gesto no intencionado y el árbitro no pitó nada.