El Barcelona, sin tiempo para lamentarse del Clásico: Koeman tiene cuatro finales en 12 días

El Barcelona perdió el Clásico, pero el calendario no le deja tiempo para las lamentaciones. El equipo azulgrana es noveno en Liga y sus próximos cuatro partidos pueden marcar el rumbo de esta temporada. Rayo Vallecano, Alavés y Celta, su visita a Kiev para jugar contra el Dínamo en la cuata jornada de la fase de grupos de la Champions, cuatro citas para los de Koeman, que pueden ser determinantes para las aspiraciones esta temporada.

Koeman no corre peligro por ahora. Laporta ratificó al técnico neerlandés antes del parón de selecciones del mes de octubre y quiere darle tiempo para trabajar con todos los jugadores. Agüero ya está de vuelta, Dembelé está a punto de regresar, y Ansu Fati va cogiendo minutos poco a poco para ganar confianza. La ausencia de Pedri es la que más preocupa, que podría alargarse más de lo previsto.

Las dos próximas semanas del Barcelona, con tres partidos de Liga ante rivales contra los que no debería dejarse puntos, pero el primero en aparecer en el camino culé es el Rayo de Iraola, una de las sorpresas en el inicio de curso. El conjunto culé visita Vallecas, recibe al Alavés de Calleja el sábado y cerrará antes del parón de selecciones contra el Celta en Balaídos.

Si los tres partidos de Liga son fundamentales para el camino del Barcelona, la cita más importante de este mes, antes de que los jugadores acudan de nuevo con sus selecciones, será el duelo de Kiev. El equipo azulgrana no puede fallar en la Champions y necesita al menos puntuar en la cuarta jornada de la fase de grupos.

La afición del Barcelona salió enfadada del Camp Nou tras la derrota en el Clásico. "Lo entiendo perfectamente, pero no hay tiempo de bajar porque el miércoles hay otro partido. El campeonato es muy largo, hay que seguir mejorando para ganar partidos y recortar distancias", señaló el entrenador neerlandés.

Aunque Koeman no se vio muy inferior al Real Madrid. "Goleado es muy exagerado pero es verdad que el Madrid ha tenido dos oportunidades para marcar en la segunda parte. El Madrid es muy peligroso a la contra, es su juego, y es casi imposible de controlar, a veces. Teníamos que intentar empatar, y por eso han creado más peligro en la segunda parte", analizó el técnico tras el Clásico.