Bernd Schuster se llevó su primera pitada en La Rosaleda. El público le pidió cambios cuando su equipo iba ganando por 1-0 en el marcador porque les notaban cansados pero el técnico alemán no hizo caso y el Athletic consiguió darle la vuelta al marcador. La grada la tomó con el alemán al grito de "Schuster vete ya, Schuster vete ya".