En la entrevista con Sara Carbonero, Santi Cazorla ha confesado que cuando sufrió la gravísima lesión creía que no iba a volver a jugar como profesional, ni siquiera poder jugar en el césped con su hijo. Por suerte, su coraje y fortaleza mental le han ayudado y ha conseguido sentirse importante en su nueva etapa en el Villarreal.