El Liverpool cosecha su sexta Champions ante el Tottenham con el penalti más rápido de la historia del torneo (0-2)

Vaya final de Champions la vivida en Madrid entre Liverpool y Tottenham. Un partido que se llevó el conjunto 'red' cosechando así su sexto título ante uno de sus rivales más importantes en Inglaterra. Antes de que el balón echase a rodar en el Wanda Metropolitano, ambos equipos realizaron un minuto de silencio que se acabó convirtiendo en una espectacular ovación en modo de homenaje por el fallecimiento de Reyes.

Un minuto de silencio que generó una gran emoción entre los aficionados y que provocó las lágrimas de Fernando Llorente y Alberto Moreno. Pero en cuanto el árbitro pitó el comienzo, el mundo del fútbol puso los ojos en el encuentro, en el que tuvieron que esperar poco para ver el primer gol. A los 23 segundos de arrancar, un centro de Mané chocó contra el brazo de Sissoko y el árbitro señaló el punto de penalti.

Salah no falló y anotó el primer gol del partido en el penalti más rápido de la historia de la Champions League. Pero con el primer tanto subido al marcador, el juego del partido se volvió monótono y lo más emocionante de la primera mitad fue una espectador en bañador que saltó al terreno de juego. Tan solo un disparo alto de Sissoko y un misil de Alexander Arnold fueron las única ocasiones de la primera mitad.

Con el tiempo de descanso finalizado, el partido subió una velocidad y se comenzaron a vivir ocasiones en ambas porterías. La más clara la protagonizó Milner con un disparo que pasó rozando la portería. Tanta era la tensión que incluso había jugadores del Tottenham que tuvieron que ser atendidos al encontrarse demasiado cargados.

Pocos minutos después Dele Alli pudo hacer el empate. Gran jugada colectiva de todo el equipo y el surcoreano, con gran calidad, intentaba una espectacular vaselina que fue bien leída por Allison. Al igual que en semifinales, la entrada de Lucas Moura dio una chispa más al partido e hizo sufrir al Liverpool en los minutos finales del partido.

Unos minutos finales en los que Alisson se erigió como el héroe de su equipo y al contrario de lo que hizo Karius la temporada pasada, el brasileño atajó todos los balones que llegaban a su portería. Disparos lejanos de Dele Alli, un remate de cabeza de Son y un disparo de falta de Eriksen pusieron a prueba al portero pero finalmente Origi redondeó la victoria con un gol a falta de dos minutos para el final.

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