El Bernabéu y la plantilla se vuelca con su estrella: “¡Cristiano, quédate!”

Entro en el Bernabéu besando el escudo. Cristiano Ronaldo había dejado a la afición del Real Madrid con un mal sabor de boca tras su bombazo en Kiev. El portugués fue suavizando el mensaje, pero parece que su futuro sigue estando en el aire.

“Es un orgullo jugar en el club más grande del mundo y con una afición que nos ha dado tanto”, dijo Cristiano al comienzo de su discurso en el Bernabéu. No pudo terminar su segunda frase y el Bernabéu le pidió que se quedara. Los compañeros continuaron el cántico y, saltando y bailando, le rodearon.

Segundos después, y tras salir del corrillo que había hecho la plantilla, Cristiano se mostró orgulloso de sus compañero. “Es imposible no ganar Champions con este equipo”, dijo al ‘librarse’ de los jugadores. Finalmente, terminó con gritando: “¡Hala Madrid!”.