Portugal había empatado sin goles ante Ucrania en el primer partido de la fase de clasificación de Euro 2020. Cristiano Ronaldo había jugado nueve meses después con su selección, pero no había sido capaz de marcar y darle la victoria a los lusos. Cristiano se iba con el gesto torcido al vestuario por el empate y un niño llorando de forma desconsolado logró esquivar la seguridad y llegar hasta el delantero. Cristiano apartó a la seguridad y abrazó al niño.