¡Tiene 10 años, es español y compite en carreras de drones! Álex Zamora, en el top 5 mundial de este increíble deporte

Es campeón de España y el cuarto mejor piloto de drones de carreras del mundo. Un top 5 mundial que ha estado a punto de convertirse en título. Hablamos con su padre, Benjamín, y nos cuenta lo cerca que se han quedado: “Hemos pagado la novatada. No sabíamos qué solo puntuaba una carrera por país y al competir dos veces en España, sólo contó la prueba que más puntos sacó”.

Una novatada que le molesta más a Benjamín que al joven piloto: “Yo sí me lo he tomado un poco mal, pero a él no le preocupa. El mismo día que se enteró de que no era el campéón, me dijo: ‘Papá, vámonos a entrenar”. Y es que, aunque es el cuarto mejor piloto de carreras de drones, Álex es solo un niño. “Los estudios son lo primero. Luego ya se verá, pero de momento el objetivo es que se divierta".

El ascenso de Álex ha sido rapidísimo: empezó en la Navidad de 2015. “Yo vuelo helicópteros de aeromodelismo y él se venía conmigo a entrenar. Como no le podía dejar uno porque era muy pequeño y es peligroso, en Reyes le compré uno de juguete y lo empezó a volar en casa”, explica Benjamín.

Se aficionó rápidamente y en agosto del año pasado tuvo su primer dron de carreras. 15 días más tarde compitió en la FPV Racing que se celebró en El Escorial y quedó el 44 de 140. “En octubre fuimos al Campeonato de España que se celebró en Barcelona y quedó campeón”, cuenta orgulloso Benjamín.

Todo ello gracias al sponsor que patrocina a Benjamín en las competiciones de aeromodelismo: “Centro RC Levante es una tienda de aeromodelismo que trajo drones y como Álex estaba empezando, le mandó dos para que empezase a competir”. Tenía solo nueve años, pero ahí empezó la verdadera carrera de Álex Zamora como piloto de drones. “Ganó en Sevilla la primera prueba del Mundial de la FAI (Federación Aeronáutica Internacional) y fichó por el ‘Spain Drone Team’. A los tres meses me llamó el manager del ‘Nexx Blades Drone Racing Team’, el mejor equipo de drones de carreras, para decirme qué lo quería fichar y ya lleva unos tres meses con ellos”, así explica Benjamín la meteórica progresión de su hijo. Un nuevo equipo con el que viajó a Rumanía y Corea. Dos torneos fuera del Mundial en los que no tuvo mucha suerte pero en los que experimentó nuevos sistemas de vídeo y distintas formas y estilos de vuelo.

La última competición fue la final del Mundial disputada en Sevilla el 11 y 12 de noviembre. Unos problemas con el vídeo le hicieron acabar en 14ª posición aunque los 27 puntos que obtuvo no pudo sumarlos a su puntuación final. “No puntuó porque ya había competido en Sevilla y en la letra pequeña de las reglas pone que solo puede puntuar una carrera por país”, explica su padre.

Así es como en algo menos de dos años, el joven piloto ha pasado de tener un dron de juguete a tener seis de carreras, cuatro de ‘freestyle’ y otros cuatros con un nuevo sistema de video. Álex ya es toda una realidad como piloto de drones de carreras, pero tanto él como su padre tienen claro que lo primero es la diversión.