Así fue el suceso que protagonizó el escritor y aviador francés Antoine de Saint-Exupéry que le impulsó a escribir “El Principito”, el libro francés más vendido de la historia. En la Navidad de 1935, Antoine sufrió un accidente aéreo en medio del Sahara y pudo sobrevivir gracias a la figura de un niño rubio que le indicó hacia donde debía dirigirse. Antoine pudo salvarse gracias a las indicaciones de esas alucinaciones visuales y auditivas que tuvo.