El periplo de Juana Rivas: de su desaparición a la entrega de sus hijos a su expareja
Mariate Díez
28/08/201719:02 h.26 de julio, Juana no se presenta en el punto de encuentro que un juzgado había fijado como lugar de entrega de los menores al padre. Un día antes ya había advertido de sus intenciones: “yo a mis hijos no los entrego. Perdonadme, pero no puedo entregarlos”.
Al día siguiente cumple con su promesa y Juana desaparece con ellos. 48 horas después Francesco Arcuri denuncia a su expareja por "secuestro".
Ese mismo día, el presidente Rajoy muestra su apoyo a Juana. Entonces, comienza una campaña en su apoyo, en la que todo el mundo corea el lema “Juana está en mi casa".
El 31 de julio Juana presenta un recurso de amparo ante el Constitucional, que este rechaza. El 1 de agosto su expareja, acusado en 2009 de maltrato, habla por primera vez ante las cámaras. “Veo que está muy mal asesorada. Casi se aprovechan de ella”, afirma.
7 días después el juzgado acuerda una orden de detención contra Juana. Se dicta entonces su búsqueda y captura.
10 de agosto. Los representantes legales de la madre vuelven a presentar un recurso de amparo ante el Constitucional, que también desestiman.
El día 15 hace pública una carta donde cuenta su pesadilla a manos de su expareja. “Tanto mis hijos como yo hemos vivido historias de terror en completa soledad, un maltrato severo físico
El 21 de agosto, no acude a declarar a la nueva citación. Un día después es arrestada al presentarse en los juzgados de Granada. El juez de Guardia decreta libertad provisional y sin fianza para ella. “Puedo ir a mi casa con ellos tranquilamente mientras siguen los siguientes pasos”, comunicó a la prensa.
Hasta hoy, 28 de agosto, fecha límite para entregar a sus hijos. Juana cumple con el ultimátum y pone fin a un mes de desafío a su expareja, pero fin también a un pulso a la justicia, con consecuencias aún desconocidas.