La llamaradas impresionaban a todos y se compartían de forma viral entre los vecinos. Tras un primer momento de caos, Facebook, Twitter y WhatsApp también han servido para informarse unos a otros, saber que los niños no iban a salir al patio y que se les ha pedido que permanezcan en casa con las ventanas cerradas. En 'Crónica Cuatro' hemos querido visitar a una de las familias con residencia cercana a la fábrica química de cloro para saber cómo están.