Tras descartar a varios sospechosos, Castle ha encontrado al asesino, en este caso asesina, del agente aéreo encontrado muerto en su avión. Se trata de una de las azafatas, Debbie, que prentendía robar un valioso reloj para solucionar sus problemas económicos y que, al ser descubierta por el vigilante, decidió matarle.