Cansados de esperar a que puedan cruzar la frontera de Macedonia en el autobús, sin alimentos y con poca agua, un grupo de refugiados ha intentado llegar a pie, algo que está prohibido. Antidisturbios han ido en su búsqueda para impedirlo. "Hay más de 70 autobuses aquí parados porque se está generando un tapón enorme en toda Grecia. Probablemente nos tengan días aquí", relataba Meritxell.