Es iraní, hijo de un gran aficionado al fútbol en general, y al Real Madrid en particular. Podría pasar inadvertido en cualquier lugar del mundo si un buen día papá Paratesh no le hubiera instado a probarse una camiseta de Argentina para ver si el parecido que él veía con Leo Messi era tan fidedigno. Ese día cambió su vida. Perdió su nombre, Reza Paratesh, para convertirse en el 'otro' Messi o, simplificando, el doble iraní del argentino. El resto de la historia todos creemos conocerla. Hasta que te sientas a su lado y compartes diez minutos con él. Ahí cualquiera puede sentir que Reza vive una vida de crack.