La inspectora Rubio intenta que Lola, la primera fugitiva detenida, confiese donde se encuentra el grupo de contagiados, pero Lola no se deja intimidar. “Lo sabes perfectamente, somos unos 10 y los jueves hacemos fiestas de disfraces. Estoy jodida, haga lo que haga no tenéis nada que ofrecerme”, dice.