Un hijo celoso, flechazos y mucha 'trospidez' en '¿Quién quiere casarse con mi madre?'
cuatro.com
20/11/201301:00 h.Porque las madres además de abrazar a sus hijos tienen su corazoncito, esta vez son los hijos los que ayudarán a las mujeres que les dieron la vida a encontrar el amor de verdad.
Toñi: “No me veo para nada con hombre mayor, en dos días me lo cargo”
Ella lo tiene muy claro, quiere encontrar al amor de su vida, pero su hijo no tanto. Gabi, nuestro príncipe de ‘¿Quién quiere casarse con mi hijo?’, vuelve junto a Luján Argüelles pero lo hace para encontrar el amor de su madre (o, más bien, evitarlo): “A mí no me destrona ni Dios”.
Quizá por ello, Gabi decidió ponérselo difícil a los pretendientes de Toñi. Al primero le puso contra las cuerdas dado que, aunque quería regalarle un libro, descubrió que no lo había leído, y no dudó en sacar el insecticida para espantar a “moscas y moscones”. También lo utilizó con Toni, un hombre al que apenas entendieron pero cuya actitud no le gustó: “Madre, que veo que te vienes conmigo otra vez”, le advertía. Pero Toñi difería, fue precisamente su actitud lo que le gustó: “Sinceramente me gusta, es un poco gilipollas pero me gusta”.
Blanca: “Mi madre sería feliz con alguien que la pudiese mantener”
Blanca cree que su madre sería feliz “con alguien que la pudiese mantener económicamente”. “De pequeñita decía que quería ser casada”, confesaba Paulina que le da importancia a su apellido porque a nadie le hace mal pero duda si definirse como pija o no. Añade que estudió con las infantas, aunque no le da importancia, y en la actualidad se dedica a las letras: “Soy escritora, una artista, no reconocida pero me da igual”.
Con estas premisas se enfrentaron a los candidatos de su madre. El primero fue Dinger, “como ding, dong”, aclaraba y despertaba la furia de Paulina: “¿¡Yo madurita?!”; También conocieron a “un cachas” que encandiló a Blanca pero no tanto su madre porque “¡No tiene ni un céntimo!” Tras algún pretendiente más que no les gustó, Paulina sufrió algo así como un flechazo: “¡Qué ilusión! ¡Qué ilusión!”, decía cuando conoció a Serafín.
Mar quiere un hombre “etéreo” y su hijo añade: “Desextrovertido”
La cultura es el cordón umbilical que une a Mar y a Javi. Por ello, es importante que el hombre de su vida comparta sus gustos. Jordi, el primer pretendiente que madre e hijo conocieron, casi dio en la diana recitando uno de los textos que ella misma ha escrito.
Pero hubo muchos más, un karateka, un hombre que se define como “playboy” y con “poderes telepáticos” y, además, Javi descubrió algo de los gustos de su madre: “Me dan morbo todos los hombres que tienen un poquito de feminidad”.
Charo quiere que con sus pretendientes surja “la oxitocina”
¿Por qué no tiene pareja? Su hijo tiene la respuesta: es por su carácter. Charo es motera, trabaja en la policía y le encantan los bailes de salón. Kike cree que el hombre ideal de su madre ha de tener una virtud: la paciencia.
Cuando conoció a sus pretendientes, quería ir al grano. Álex le gustó desde el primer momento, es vigilante de seguridad pero, en el momento que se puso a tocar la guitarra, le pidió que se dejara de miramientos: “¿Nos dejamos de romanticismos ya?” También hubo momentos para reír y es que a Charo no le gustó nada que Lorenzo entrara bailando: “¡Vaya panorama! ¿Te has traído pañuelos? Para llorar un rato”, preguntaba a su hijo.
Tere está enamorada de Getafe, tiene predilección por los frutos secos y debilidad por su hijo. Ahora, busca al hombre de su vida: “Quiero encontrar a esa persona que me dé chispa y le ponga las pilas a este cuerpo serrano”, decía. Tere llegó al encuentro con Luján Argüelles “a pecho descubierto” y es que quiere un marido: “Tengo 55 años y no estoy para perder el tiempo”.
Madre e hijo rieron con Libri, se asustaron con los secretos que parecía ocultar el segundo candidato, sonrieron de nuevo con un payaso y con Antonio cambió su cara, parecía encandilada. Pero lo mejor llegó con Juan, Tere confesaba: “Tengo el corazón que se me va a salir por la boca, este hombre me gusta mucho” y su hijo coincidía con ella.
Las madres eligen a sus pretendientes
Y llegó la hora de la verdad, las madres tenían que elegir a sus candidatos. Toñi se quedó, entre ellos, con el que menos le gustaba a su hijo; Mar eligió a sus seis chicos y ya tenía favorito, al igual que su hijo: Jordi; Tere escogía a sus candidatos, Libri recibía la noticia entre lágrimas y lo celebraba abrazándola; Charo eliminó a Jesús “por un choque generacional” y a Lorenzo porque sus bailes no le gustaron y Paulina escogió, entre ellos, a su claro favorito: Ángel.
La primera cita de Mar: "Si fueses Bollicao te comía hasta la pegatina"
Empezaron en el Café Gijón, allí tuvo un encuentro a solas con Jordi, que le encandiló, pero también recibió un mensaje de Luján: Tocaba eliminar y Mar no lo dudó, Pere estaba eliminado. Después del café, les apetecía bailar y Mar aceptó.
Tere expulsa a Juan en la primera cita
Tere invitó a sus seis candidatos a comer unos churros y unas porras, un plan que le pareció "divertidísimo". Pero hubo más, Luján Argüelles tambiéhn intervino para anunciar que tocaba eliminar, y el elegido fue Juan.
Así arranca '¿Quién quiere casarse con mi madre?', pero aún nos queda un largo camino que recorrer. En el próximo programa las madres adquirirán 'poderes', descubriremos secretos y seremos testigos de nuevas citas.