El Corte Inglés y Fujitsu acuerdan la implantación de soluciones de trazabilidad inteligente de productos textiles

En concreto, se trata de unir fuerzas para liderar este segmento, gracias a la implantación de un sistema creado para ofrecer al entorno de salud español toda la información necesaria para la toma de decisiones. Se pretende conseguir un buen funcionamiento y una modernización de esta área en hospitales, para que no sea un mero control de prendas, sino que represente la implantación de una gestión de calidad de todo el textil del sector salud.

El desarrollo de estas actividades es posible ya que el Corte Inglés División Empresas cuenta con experiencia y relevancia en la fabricación de productos textiles, tanto de uniformidad como de lencería y ropa de cama, también denominados ropa plana, como han explicado en un comunicado.

Por otro lado, Fujitsu colabora con su 'partner' tecnológico Sico, que ha hecho realidad una 'suite' de productos, denominados Sicolares HIGIA, que ofrecen la más sofisticada trazabilidad de textiles a partir de un tag reutilizable, ultrarresistente y único en el mercado. Es importante señalar que está diseñado sin metal, por lo que puede ser utilizado en entornos MRI como escáneres o resonancias, y tiene un tamaño reducido, además de hacer que pase inadvertido y sea indetectable para el usuario.

Para el desarrollo de este acuerdo, el Corte Inglés División Empresas y Fujitsu han creado un equipo de trabajo conjunto, compuesto por representantes de ambas compañías. Ambas organizaciones confían en poder liderar sofisticados proyectos que permitan a las instituciones sanitarias españolas, públicas y privadas, obtener importantes retornos de inversión.

Esta mejora consigue importantes ahorros a través de un mayor control de las prendas y un mejor conocimiento de las necesidades reales de cada organización. Uno de los objetivos es disminuir las pérdidas de producto que a día de hoy se sitúan entre el 2% y el 15% mensual, así como conseguir más eficiencia en la lavandería, evitando errores humanos, hurtos, mermas y un mayor control textil en el sector, entre otros.