Un guardia civil de la localidad valenciana de Villajoyosa ha sido condenado a 22 años de prisión por intentar asesinar a una compañera, a su marido y al hijo de ambos. El hombre entraba en casa de las víctimas y vertía insecticida en las comidas. Así intentaba envenenarlos. La principal prueba de la pareja es una cámara que colocaron en su salón cuando sospecharon que alguien entraba en casa.