Si aprecias tu pelo no intentes comer maíz con un taladro. Aunque suene a locura, lo cierto es que una joven se grabó intentando esta hazaña. La suerte quiso que un mechón de pelo se le enganchase con el aparato y se lo arrancase. Si no eres aprensivo, ve con tus propios ojos cómo sucedió lo ocurrido.