La muerte de Sandra Bland ha provocado una ola de indignación en Estados Unidos. La mujer, una afroamericana de 28 años apareció muerta en una celda deTexas. La policía aseguró que se trataba de un suicidio, pero la familia de la fallecida niega esta posibilidad y las autoridades han decidido investigar el caso por un posible homicidio. La joven acabó en la cárcel tras una detención, por una infracción de tráfico.