Las familias de las cinco víctimas de la tragedia del Madrid Arena han preferido no acudir a la primera jornada del juicio. Demasiado duro recordar lo que pasó ese día y demasiado dura acudir a un juicio en el que la petición máxima de cárcel es de cuatro años para Miguel Ángel Flores, organizador de la fiesta. Ellos esperaban, al menos, cuatro años por cada muerte.