En Valencia, el fuego calcina casi tantas hectáreas (48.538) como en el resto del país

Los incendios de Valencia ya han arrasado 48.538 hectáreas según ha informado el consejero de Gobernación de la Comunidad Valenciana, Serafín Castellano, por lo que podrían haber calcinado tantas hectáreas como todos los fuegos registrados en España hasta el 31 de mayo, cuando se quemaron 49.738 hectáreas, según datos del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. Los alcaldes de la zona estiman provisionalmente que podría haberse superado esta cifra.

En concreto, en la zona de Cortes de Pallás se han quemado 28.643 hectáreas, de las que 23.602 corresponden a matorral y otras 5.041 a arbolado, de acuerdo con la primera valoración realizada por la unidad técnica del incendio, que está ya estabilizado y sin llamas.

Según ha explicado el consejero, ese fuego "se encuentra en una buena situación, estable, sin ningún tipo de llamas" y en estos momentos "se continúa refrescando el perímetro, tanto con medios aéreos como terrestres, y atendiendo puntuales reproducciones que puedan ir surgiendo en el perímetro".

Por su parte, en el incendio registrado en Andilla, se han quemado 19.940 hectáreas, de las que 13.293 eran arbolado y 6.647 matorral, aunque Castellano ha advertido de que esa primera perimetración de la superficie afectada "estará sujeta a variación" mientras el incendio no quede igualmente estabilizado y sin llamas.

En la actualidad, ese incendio "sigue con algunos puntos inestables" después de que el viento haya "cambiado en diversas ocasiones" a lo largo del día y "se está trabajando en Andilla, en Jérica y en la Cova Santa, y atendiendo puntuales reproducciones en el perímetro". "No podemos decir que esté estabilizado, aunque se está trabajando con todos los medios para poder estabilizarlo lo antes posible", ha apuntado el titular de Gobernación.

Accidentes de helicópteros

Serafín Castellano ha lamentado los dos accidentes de helicóptero sufridos por personas que trabajaban en las tareas de extinción del incendio de Cortes de Pallás, uno en el embalse de Forata, en el que ha fallecido el piloto de la aeronave enviada por el Ministerio de Medio Ambiente --según han confirmado fuentes de Delegación del Gobierno en Aragón--, y un segundo siniestro en la Sierra Martés, en el que han resultado heridos los dos ocupantes del helicóptero. Según ha indicado el consejero, ambos "están conscientes" y "se quejaban de la espalda", por lo que han sido trasladados a un centro sanitario.

En este punto, ha remarcado que la seguridad de las personas es siempre el objetivo "prioritario" en este tipo de situaciones, tanto de los afectados por los incendios como de "todas las personas que trabajan y se juegan la vida en este tipo de emergencias".

Castellano ha alabado la gran profesionalidad de los efectivos que trabajan "en unas condiciones muy duras, realmente difíciles, para poder combatir estos importantes incendios en nuestra comunidad", y les ha trasladado el agradecimiento y el reconocimiento de la Generalitat a su labor y a la de "las administraciones que están colaborando de una manera inestimable en estas tareas de extinción".

Reunión con Sánchez de León y portavoces patlamentarios

Además, ha anunciado que este martes, a las 12.00 horas, se reunirá con la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Paula Sánchez de León, y con el general jefe de la Guardia Civil de Valencia, Fernando Santafé, en la sede de la Delegación en Valencia.

Posteriormente, a las 17.00 horas, ha convocado a los portavoces de los grupos parlamentarios en las Corts Valencianes en la sede del Centro de Coordinación de Emergencias (CCE), ubicada en l'Eliana (Valencia), "para darles toda la explicación y detalles respecto a los incendios" y los incidentes registrados. Apenas diez días después, el jueves 12, comparecerá en las Corts a petición propia.

Castellano ha avanzado asimismo que este martes también se celebrará una reunión convocada por el jefe del Consell, Alberto Fabra, a la que asistirán los responsables de las Consejerías de Presidencia, Agricultura, Medio Ambiente, Gobernación y Delegación del Gobierno en la Comunitat Valenciana.

La delegada ha confirmado seguidamente que también asistirán a ese encuentro el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, y "un alto cargo de la Vicepresidencia" del Gobierno central.

Ayudas "sin ningún tipo de retraso"

Según ha explicado Sánchez de León, en esa reunión abordarán la puesta en marcha "de la forma más rápida y eficaz posible" de las ayudas a los afectados, ya que "hoy mismo" han comenzado a "trabajar para que no tengan ningún tipo de retraso". En este sentido, ha resaltado que "mañana estará aquí el ministro para no perder ni un minuto de tiempo en continuar trabajando en los efectos devastadores que ha tenido este incendio" y en "devolver la normalidad" a la zona.

La delegada también ha expresado su "solidaridad" por los accidentes registrados en la tarde de este lunes, así como su "absoluto reconocimiento a la profesionalidad y el trabajo de todos los efectivos y las personas que han estado trabajando durante estos días y que siguen hoy en los incendios".

Por último, ha indicado que el presunto autor del incendio de Andilla ha sido puesto en libertad con cargos tras prestar declaración ante el juez, con obligación de comparecer, y ha sido imputado por un delito medioambiental por imprudencia grave.

Malos datos para Valencia

Según, los datos del Ministerio de Agricultura Alimentación y Medio Ambiente, hasta el 31 de mayo se ha triplicado el número de hectáreas arrasadas en esos meses respecto a la media del decenio 2002-2011. Estas 49.738 hectáreas suponen además un 38,97 por ciento más que lo quemado hasta la misma fecha de 2011.

De este modo, los incendios de Valencia, por sí solos superarían la superficie total arrasada en los peores años del decenio, que fueron 2008, cuando se quemaron 50.321 hectáreas, o 2010, con 54.770 hectáreas, así como algunos de los ejercicios con trágicos registros de incendios de los últimos cincuenta años, como 1961 (46.251 hectáreas); 1963 (22.679); 1971 (35.044 hectáreas); ó 1996 (59.814 hectáreas). No obstante, la media del decenio 2002-2011 está en 127.209 hectáreas.

Diez grandes incendios

Antes de estos siniestros, los grandes incendios, que arrasan más de 500 hectáreas, se habían producido diez siniestros de este tipo, en los que han ardido 12.222 hectáreas hasta el mes de junio. De estos, los más grandes han sido el del 16 de mayo en Rasquera (Tarragona), en el que ardieron 2.735 hectáreas; seguido por el del 28 de febrero en Hermisende (Zamora), donde se quemaron 2.329 hectáreas, y el del 8 de marzo en Montanuy (Huesca), donde se incendiaron 2.084 hectáreas.

En este contexto, fuentes de la Fiscalía de Medio Ambiente han recordado su insistencia en que en torno al 95 por ciento de los incendios se produce por acción del hombre, bien sea imprudencias y negligencias o bien, con la intencionalidad de causar daño y que sin la colaboración ciudadana es "imposible" acabar con los incendios forestales.

Respecto a los fuegos en Valencia, han añadido que, de momento hay dos detenidos. El primero de ellos, por provocar el fuego cuando estaba trabajando en la instalación de unos paneles solares fotovoltaicos y, el segundo, por una imprudencia de quema de rastrojos.

El Código Penal español y, concretamente el artículo 358, contempla penas por delitos de incendio forestal que pueden ir desde los 6 meses hasta los 20 años de cárcel. En el caso de imprudencia, estas penas podrían ir de 1 a 5 años de prisión y multa de 12 a 18 meses (de 1,20 a 300 euros diarios).

Pero estos cálculos varían en función de distintas consideraciones judiciales, ya que si la imprudencia es grave y el fuego ocasiona víctimas mortales o pone en riesgo la integridad física de las personas, estas penas podrían ascender a entre 10 y 20 años de prisión.

Finalmente, estas consideraciones de cara a imponer una sanción o pena de cárcel dependen, en parte, de si la investigación esclarece que se ha puesto en peligro la vida o integridad física de las personas o se hayan producido graves efectos erosivos o se hayan alterado significativamente las condiciones de vida vegetal y animal.