Comunidad de Madrid recalca que debe aplicar la LOMCE y que una prueba similar a la selectividad genera tranquilidad

El consejero de Educación, Juventud y Deportes, Rafael van Grieken, ha insistido en que la Comunidad de Madrid tiene que cumplir la LOMCE "de la mejor manera posible" mientras no haya otra normativa y que la intención es que la prueba de acceso a la universidad se parezca lo más posible a la antigua selectividad, pues ello genera tranquilidad a las familias.

En una entrevista con Europa Press, Van Grieken ha reiterado que la obligación de la Comunidad de Madrid es cumplir la normativa vigente a día de hoy, que en este caso es la LOMCE y que si al final se producen cambios a nivel de legislación estatal, el Gobierno regional los aplicará.

"Si existe en conjunto la voluntad de cambiar, pues cambiemos pero lo que tenemos que hacer es aplicar la normativa a día de hoy. Mientras no haya otra normativa seguiremos aplicando la LOMCE y todo lo que tiene alrededor. Cuando haya cambios, aplicaremos los cambios", ha subrayado el consejero de Educación de la Comunidad de Madrid.

No obstante, Van Grieken ha subrayado que hay un "aspecto crítico" que son las evaluaciones externas de 4º de la ESO y 2º de Bachillerato, las conocidas como 'reválidas', y que en el caso de Bachillerato el Gobierno central "ya ha dicho" que se va a hacer "lo más semejante posible" a la antigua Selectividad.

"No puede ser lo mismo porque ya hay asignaturas nuevas", ha señalado el consejero para especificar que en los aspectos formales se va a intentar dar la "mayor continuidad posible" a la antigua prueba de acceso porque genera "tranquilidad y certidumbre" a las familias.

Por ello, ha explicado que la prueba de acceso tendrá, como era habitual, una logística muy similar a la Selectividad y tendrá correctores de universidad e institutos. Por ello, se está en diálogo con las universidades madrileñas para coordinar esos aspectos.

Recuerda el consejero que el Gobierno central ya avanzó que estas pruebas no tendrán efectos académicos, lo que en el caso de Bachillerato supondrá que se convierte en una prueba de acceso a la universidad. Así, los alumnos que no quieran hacerla podrán obtener de igual forma su título.

En lo referente a la prueba de 4º de la ESO, la Consejería está pendiente de que el Ministerio saque un Real Decreto antes del 30 de noviembre donde vendrá recogido quién tiene que examinarse y el mínimo de competencias y conocimientos que incluirá. En este caso al no tener tampoco efectos académicos, esa 'reválida' se asemejará a una prueba diagnóstica.

VE POSITIVA LA CONTINUIDAD DE MÉNDEZ DE VIGO

Por otra parte, Van Grieken ha afirmado que la continuidad de Iñigo Méndez de Vigo al frente del Ministerio de Educación es un "acierto" por su carácter dialogante, pues arranca una legislatura con "cierto grado de complejidad" por los equilibrios que deben lograr un gobierno en minoría.

Además, considera que también es positivo que continúe al frente de esta nueva etapa la misma persona que ha estado al frente del Ministerio porque "no hay tiempo que perder".

"Me parece una persona muy dialogante, que busca consenso, que es firme en sus convicciones pero capaz de convencer y ser convencido si las alternativas que se le ofrecen son convincentes", ha subrayado Van Grieken.