El entrañable encuentro de Obama y el príncipe George en el Palacio de Kensington

La buena sintonía entre los Obama y la reina Isabel se extiende a las nuevas generaciones. Los duques de Cambridge y el príncipe Enrique los reciben con cariño. Guillermo pide incluso disculpas por la lluvia que está desluciendo la visita del presidente estadounidense. Tras posar sonrientes, comparten una cena a la que se une un invitado muy especial: el príncipe George, que no duda en mostrar a Obama su destreza con el caballito que el mandatario le regaló cuando nació. "Es adorable", asegura Obama en este encuentro con jóvenes, a los que insta a rechazar el cinismo y el pesimismo. Preguntado sobre su legado, dice que se siente orgulloso de la reforma sanitaria, del fin de la crisis, del acuerdo nuclear con Irán, pero sobre todo, de haber sido fiel a sí mismo durante todo su mandato. Obama rinde homenaje al pasado asistiendo a una representación de 'Hamlet' en el 400 aniversario de la muerte de Shakespeare. Y, aunque el Reino Unido se plantea su ser o no ser en la Unión Europea, el presidente confía en un futuro con Londres en el Club de los Veintiocho.