Los vecinos aseguran que la tragedia podía haberse evitado, que ya habían advertido del peligro, de lo que podía suceder si se desataba un incendio en la torre Grenfell. Se remodeló hace un año. Pero sólo había una vía de salida, las alarmas y los aspersores anti-incendios no funcionaron y la fachada se revistió con un material altamente inflamable.