El gran incendio en la isla de Madeira continúa extendiéndose por la capital Funchal, donde millares de personas han sido evacuadas. Al menos tres personas han muerto ya a causa de las llamas.
El fuego se ha propagado rápidamente por el efecto del viento y del calor, hasta llegar a la ciudad, sin que los bomberos puedan hacer nada por frenarlo.
Las autoridades esperan recibir en las próximas horas refuerzos procedentes de Lisboa.