En Brasil, a solo 5 días del comienzo de la inauguración de los Juegos Olímpicos, algunas instalaciones deportivas distan mucho aún de estar consideradas aptas para la celebración de un evento de esta repercusión. Es el caso de la bahía de Guanabara, donde la contaminación pone en riesgo la salud del deportistas que van a competir allí.